Desde septiembre de 2015 tenemos unos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) acordados por la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Un plan de acción global para promover el desarrollo sostenible a través de 17 objetivos que buscan abordar la pobreza, la desigualdad, el cambio climático, la paz y la justicia, entre otros desafíos.
Si te preguntas ¿qué ha sido de ellos?, te diría, resumidamente, que a cinco años de la fecha de referencia para estar completados no parece que estén teniendo muchos resultados, más allá del reparto de fondos y las justificaciones para recibirlos.
Les pasa algo parecido que a las Cumbres por el Clima que vienen celebrándose desde hace casi 20 años sin conseguir objetivos, hasta el punto de que quienes controlan la agenda son las multinacionales responsables del cambio climático.
Ambos, cumbres y objetivos, están dirigidos en principio a toda la sociedad mundial, pero luego si vas a la redacción tienen un papel privilegiado gobiernos, organismos globales y empresas poderosas, además de organizaciones sociales que muestran voluntad, pero no van más allá. El resultado es que el Cambio Climático y aquello que se quiere enmendar de nuestra sociedad van descabezados al precipicio del que alerta incesantemente la comunidad científica.
Las personas, mientras tanto, seguimos cual espectadores; como si nosotros no estuviéramos en el rebaño que se va a despeñar.
¿No podemos hacer nada?, sí, pero esperamos que sean otr@s quienes actúen por múltiples motivos aunque la explicación científica común a tod@s es que estamos alienados.
Personaliza y haz tuyos los Objetivos de Desarrollo Sostenible sin esperar por la ONU, los gobiernos u otros poderes, porque tú tienes poder
Sé que no se puede pedir ‘peras al olmo’, pero no somos olmos, somos humanos y cada cual de nosotr@s somos capaces de muchas cosas, particularmente sabemos luchar por la supervivencia, individual y colectivamente, por eso tenemos sobre el resto del planeta una responsabilidad que no debemos ignorar, por el interés y conveniencia de tod@s, con nuestras diferencias y diversidad.
Debemos ’empoderarnos‘, un palabro que suena mal por raro (en Latín Rarus significa escaso)



