Desconectarse del Sistema
Ayer fue un día de descubrimientos. Nos hemos encontrado muchas personas participando en redes que buscan desvincularse de la economía y organización social preexistente para crear una distinta.
La entrada de personas en ellas motivaba visitas de nuevas personas a otras redes similares buscando información, afinidades, colaboración. Ofreciendo lo que sabían hacer, buscaban la cercanía. Creo que hemos aprendido lo suficiente para hacer esto y hay herramientas que lo permiten.
La experiencia fue en Telegram, que hoy por hoy no está manipulada para controlar el efecto social como sucede en Twitter, Facebook, Instagram, Google, Whatsapp… Las herramientas imitan el efecto social que usamos simplemente porque somos sociales. Si alguna fracasa buscamos otras, y sino encontramos de igual forma cualquier vía para hacer red social, porque somos así, no por la tecnología. Ya sucedió antes con los primeros meses de pandemia en 2020, la solución no es tecnológica sino social.
La novedad es que ahora muchas personas están llegando a esta conclusión no por un problema específico sino por todos. La sensación de caos y grave amenaza por el cambio climático, por la guerra, por la transición energética, por las dificultades para superar el día a día nos mueven a escapar de aquello que presentimos forma parte del problema. Hay que decirlo así porque la manipulación es tan grande, y los medios tan poco fiables, que tener grandes y solidas certezas es hoy una rareza. Pero ¡vaya que si es deseable saber que algo funciona de una forma concreta!, hacer una prueba y comprobarlo, eso da solidez a nuestros pasos, lo llamamos comúnmente ciencia si responde al método científico.
Redes de conocimiento
Este movimiento entre redes es lógico porque todas, aunque compartimos las características humanas y eso nos hace iguales, somos al tiempo distintas por tener experiencias, conocimientos, actitudes, y relaciones distintas, hasta en donde vivir es distinto.
Muchas personas que se desplazaron buscan a volver a su tierra de origen o a su núcleo familiar o a su cuadrilla. El movimiento forma parte de la búsqueda del lugar propio, tanto por la vida que quiere cada cual como por aquellos valores que forman su identidad personal. El movimiento en red debe seguir, forma parte del aprendizaje y conformación del poder personal y grupal.
En este movimiento necesitamos una realidad social en la que la relación con otras personas nos complemente. Por mucho que sepamos hacer muchas cosas no podemos saberlo todo y siempre hay quien hace unas cosas mejor que otras. El sitio donde estemos impone algunos condicionantes, los de la tipología del lugar, si es urbano o rural, si hay casas o no… la cultura preexistente.. Tendrá sus buenas prácticas y su problemas como las personas que desgraciadamente hemos aprendido malos hábitos, espontáneamente o por la educación, que forman parte del problema.
Dado que somos así, y las cosas están como están, debe haber una forma menos problemática y eficaz de hacer este cambio porque el tiempo corre y se reducen las posibilidades de asegurar un futuro y una vida cotidiana mejor que lo que está creando el sistema que domina el mundo.
Redes de Confianza y Cercanía
En la relación social cercana, aquella en la que vivimos cada día, buscamos tener una cierta seguridad, que se puedan hacer y resolver las necesidades de cada cual y ser felices en ello. Sentir que hay confianza, que el vecino no te va a asaltar o divulgue falsedades para crearte enemistades. La confianza por defecto no existe, es algo que se va creando en un ambiente sin hostilidades, pero que ya existe, en nuestro club, en la familia, con los amigos, con los colegas de un tema u otro. Para conseguir eficacia y disfrutar en estas redes es buena idea partir de la confianza, que no es un hecho simplemente individual sino también social, que se hace en el día a día.
En la red global es bueno que también haya confianza, pero se tardará mucho en conseguirla, es un objetivo muy ambicioso cuando lo principal en ella es la buena información, mas que la relación diaria. Es en la relación local, donde corre nuestra vida objetiva y necesitamos obtener de la sociedad lo que nos ayude a hacer la vida diaria con sus necesidades. La práctica habitual es que alguien presenta a alguien y con ese hecho adquiere una pequeña responsabilidad ante el grupo. Si hay problemas le reprocharan al que ha traído al problemático y se verá obligado a intervenir. Es por tanto una buena práctica que la entrada en los grupos locales siga un procedimiento similar al que la sociedad ha usado siempre, que para participar de la actividad en un grupo local alguien te presente.
La confianza no garantiza que no haya problemas pero si aporta un ambiente sin hostilidades en el que es posible discernir entre información veraz y información manipulada sin que se provoque un conflicto.
Educación y deseducación
En este punto es conveniente acordar colectivamente algunos procedimientos para la limpieza de falsedades y la deseducación de los lastres sociales que cada cual arrastramos, desde los desconocimientos hasta la simple y llana mala educación.
En ocasiones se ha conseguido un acuerdo social que ha conseguido pequeñas evoluciones de la humanidad. Estos acuerdos han sido de todo tipo: desde el triunfo de determinados avances técnicos como la navegación, la comunicación en red, como derrocar la monarquía o crear una república popular. Las revoluciones en ocasiones han causado tantos muertos como la propia guerra.
La situación es tan delicada que no podemos entrar en guerras sociales como método de solución, ya hay demasiada destrucción creada por el propio sistema. Necesitamos de capacidades que tenemos mas eficaces y menos dañinas como son la inteligencia social, pero también necesitamos de la paciencia y el cariño para que cada persona evolucione a su paso, recibiendo lo que necesite de la sociedad y haciendo pequeños cambios en su actitud hacia las demás.
Bien común
Mirando en perspectiva lo que hemos hecho a lo largo de nuestra existencia querremos recuperar algunos de nuestros logros como la democracia primigenia, la educación general o la sanidad universal, pero también no repetir las guerras mundiales, ni los genocidios, ni las hambrunas ni la peste negra, ni la opresión a la mujer o a quienes tengan otro color de piel, tampoco permitir la destrucción de la naturaleza o el bien de unos pocos a costa de los demás. Necesitamos bien común.
Necesitamos seguridad, hacer las cosas mejor, hemos aprendido, se trata de la supervivencia, es un Viaje Evolutivo.